Oficialmente los 50 estados de la Unión Americana han comenzado a dar pasos hacia la reapertura, sin embargo, el brote de coronavirus sigue latente en el país, y aunque millones de estadounidenses han tenido la oportunidad de quedarse en casa para contrarrestar el número de contagios, la situación no ha sido la misma con los latinos.
Y es que, es justo este sector de la población el que ha resultado más afectado ante la crisis sanitaria, pues la mayoría de los trabajos esenciales, los cuales no pudieron suspender labores pese al brote, se encuentran conformados por latinos; y gracias al labor de éstos Estados Unidos continúa de pie.
Pues, más del 50% de los empleados considerados esenciales son latinos, muchas veces pertenecientes al sector de la agricultura, la construcción, la industria alimentaria, la limpieza y más; es por ello que esta comunidad ha sido la más afectada, pues trabajan en lugares que no sólo son mal pagados, sino, que se les exige abandonar sus hogares día tras día para seguir con una labor cuya interacción los pone en riesgo.
Asimismo, otro gran factor para que la comunidad latina resulte ser la más afectada es el seguro médico, pues hay que recalcar que muchos son inmigrantes indocumentados, por lo que, con la nueva Ley de Carga Pública, éstos temen asistir al médico, ya que, como lo mencionó Donald Trump, todo aquel que represente una “carga” para el país, en cuanto a gastos, no tendrá el derecho de gozar de los beneficios migratorios, tales como solicitar la residencia o la naturalización.
Sin embargo, el Servicio de Ciudadanía e Inmigración de los Estados Unidos (USCIS, por sus siglas en inglés) ha dado a conocer que, mientras dure la pandemia en el país de las barras y las estrellas, las pruebas, así como el tratamiento por coronavirus no serán considerados como un factor negativo dentro de la Ley de Carga Pública.
Aunque claro, otra gran barrera es la comunicación y el idioma, dando como resultado que muchos latinos se encuentren desinformados, añadiendo así una causa más al por qué son la comunidad más afectada en esta pandemia.
WASHINGTON—El Servicio de Ciudadanía e Inmigración de Estados Unidos anunció hoy una nueva que implementa dos decisiones recientes del fiscal general acerca de cómo dos o más condenas por manejar bajo la influencia (DUI, por sus siglas en inglés) afectan los requisitos de buen carácter moral, y cómo los cambios posteriores a condenas y sentencias penales afectan las convicciones y sentencias para propósitos de inmigración.
El 25 de octubre, el fiscal general determinó en el Caso de Castillo-Pérez que dos o más condenas por DUI durante el período estatutario crean una presunción refutable de buen carácter moral. Al momento de solicitar un beneficio de inmigración para el cual se requiera tener buen carácter moral, un solicitante que tenga dos o más condenas por DUI podría superar esta presunción al presentar evidencia que tiene buen carácter moral, aún en el periodo durante el cual cometió los delitos de DUI. El término “conducir bajo la influencia de drogas o alcohol” incluye todos los delitos estatales y federales por conducir bajo los efectos del alcohol o drogas, lo que incluye conducir en estado de ebriedad, operar maquinaria bajo la influencia del alcohol o drogas y otras infracciones que hacen ilegal que una persona opere un vehículo de motor mientras esté impedido de hacerlo.
También, el 25 de octubre, el fiscal general decidió en el Caso de Thomas y Thompson que el “término de encarcelamiento o sentencia” por lo general se refiere a la sentencia penal original de un extranjero, sin tener en cuenta los cambios posteriores a la sentencia. Las órdenes posteriores a la sentencia que cambian la sentencia original de un extranjero solo serán relevantes para fines de inmigración si se basan en un defecto procesal o sustantivo en el proceso penal subyacente.
“En respuesta a dos decisiones recientes del fiscal general, USCIS actualizó recientemente las guías de políticas sobre cómo demostrar buen carácter moral para propósitos de inmigración”, dijo el director interino de USCIS, Mark Koumans.”Como lo indicó el fiscal general, esta guía mejora la seguridad pública al garantizar que los adjudicadores de USCIS consideren las convicciones de manejar bajo influencia con el estándar de escrutinio apropiado”.
Bajo la ley de inmigración estadounidense existen consecuencias de inmigración por condenas y sentencias penales, lo que en algunos casos hace que los solicitantes resulten inadmisibles, sujetos a deportación o inelegibles a un beneficio de inmigración. Además, ciertos beneficios de inmigración requieren que el solicitante demuestre que un extranjero tenga buen carácter moral para ser elegible al beneficio. Por ejemplo, los solicitantes de naturalización deben demostrar buen carácter moral.